No conocí a los Beatles, ni el vestido blanco de Monroe. Barrio Sésamo me pilló por poco, y no llegué a tiempo para Martes y Trece. Vivo con los U2 cincuentones, y The Police se mantiene por Sting. Nunca conduciré un 600, y no he visto en televisión las Olimpiadas en Barcelona. Me perdí la voz por radio de "Un pequeño paso para el hombre, un gran paso para la humanidad" y ya no vivo golpes de estado ni represiones (más o menos). Hace tiempo que no utilizo una cabina de teléfono. Sólo conozco las arrugas de Liz Taylor, de George Clooney y los michelines de Maradona. Pero ¿quién dijo que cualquier tiempo pasado fue mejor? Tengo la experiencia de Joaquin Sabina, canciones al alcance de un "click". Para ver el mar sólo necesito 3,5€ y si salgo a la calle, no necesito carabina. Conozco el Jazz, el Rap, la música Pop. Suenan Mozart y Bach después de Paulina. Como Sushi, tallarines y Whopper. Compro jamón serrano y langostinos sin necesidad de tener una casa en Marbella. Y aún así, conozco lo que fue, y me encanta lo que vendrá.
Crñonicas de Kriptonita (IV)
No hay comentarios:
Publicar un comentario